Topografiando el Viandico

16 de julio de 2021

Topografiando el Barranco de Viandico

Después de la campaña por Sarrios, Miguel y yo continuamos con un trabajo diferente, en esta ocasión, para hacer un estudio sobre las avenidas van a estudiar el tamaño, pendiente, materiales de transporte y demás en el barranco del Viandico desde el Puente de Sercué hasta su conexión con el Bellós.

La idea era hacer todo el descenso, de hecho contábamos con permiso para bajar hasta el Bellós, pero a pesar de madrugar, nos llevó mucho más tiempo del previsto y no lo pudimos terminar.

Día de trabajo en el Viandico.

9:45 Entramos por el cruce del Bco. de Flageto, por el sendero hasta el Puente de Sercué. Allí entramos al cauce. En nuestro caso, retrocedimos unos metros y nos vestimos, ya que había agua en el cauce y te mojabas hasta el pecho. Por delante del puente aguas abajo, vimos que había una cuerda fija para entrar un poco más adelante y evitar la poza larga y profunda que hay bajo el puente. Este sitio es un lugar del que tenía un grato recuerdo, hacia 20 años que no venía por aquí,  y fue una grata sorpresa reencontrarme con la parte "seca" del Viandico.

 

La tarea de medir fue laboriosa, inicialmente pensábamos hacerlo con el medidor laser entre dos puntos, pero por si no veíamos la luz del láser, llevábamos también la cinta métrica de 25 metros, menos mal que no hubo que sacarlo. Al principio que estábamos a la sombra se nos dio bien, luego con el sol, tuvimos que ir reduciendo las distancias entre medidas. Una tarea "de chinos". Pero con lo bien pagado que está...😂

Entramos por el camino a Sercué.

Por su precioso puente.

Aguas arriba el cauce baja seco salvo en los mayencos.

Nos vestimos y entramos

Nos mojamos al pasar por debajo. No se hace pie en un corto tramo.

Si no queremos mojarnos, se puede ir por la izquierda del río y bajar al cauce por una cuerda fija pasamanos un poco más adelante del puente.

Vamos midiendo a la faena ayudados por la sombra.

11:00 A la altura del cruce con el barranco de Flageto, nos sorprende ver las instalaciones nuevas y con cuerdas fijas para evitar el último rápel. Será que ahora, desde el cierre de la Cueva del Molino de Aso o del Moro, las empresas entran con los grupos al Viandico por aquí...

Seguimos midiendo, salvamos algún tramo de agua estancada, el cauce sigue seco y llegamos a un gran salto, evitable por la derecha, pero como hay que medir las caídas de agua y profundidad de las pozas, hacemos el rapel, el más largo de todo el barranco, casi 12 metros, de dos químicos. Del fondo, seco, junto a un gran tronco empotrado, sacamos una pequeña culebra de agua que debe llevar días tratando de salir de allí sin éxito, cuando la soltamos más arriba, sus movimientos son lentos, señal de que lleva tiempo sin comer ni beber..

Avanzamos y llegamos a al confluencia con Flageto.

Hay cuerda fija para evitar el último rapel.

Habrá que venir un día a hacerlo... Me sorprendió verlo equipado con químicos.

Llegamos al primer gran resalte, se puede evitar por la derecha.

Vistazo del rapel de 12 metros.

Hoy como seguimos el cauce del agua, lo bajamos.

Rescatamos a una pequeña culebra moribunda.

Saliendo del fondo del rapel. Que se puede evitar, repito.

11:30 Al rato llegamos al rapel que no se puede evitar, yo en mi juventud lo llegué a destrepar, pero el final es resbaladizo. Hay instalación buena a la izquierda. Recepción en agua.

Seguimos disfrutando de las curiosas formaciones que salpican el recorrido y llegamos a dos "cuevas". Son dos aliviaderos/surgencias que actúan como trop-plein cuando el barranco está con mucha agua y no es suficiente con el nacedero permanente.

Rapel de 7 no evitable. Destrepable con sumo cuidado.

Bonito agujero.

Seguimos a la faena.

Localizamos una entrada de  la cueva del Cañón de Asó (no la del Molino, al otro margen)

De dentro hacia afuera.

Hay agua

umm!!!  un sifón a explorar...

Nos pica la curiosidad, y oímos el rumor del agua...

Nuestra curiosidad no tiene límites, ¡vaya dos nos hemos juntado! Siguiendo 80 metros, sales por la otra boca. 

Miguel alucina con los sedimentos, ya está pensando en datarlos.

Con pena, salimos que tenemos mucha faena.

Visitamos la zona rosa. Miguel  conectó las dos bocas días más tarde.

llegamos a la 2ª boca que actúa de trop - plein.

Tienta entrar, pero vamos justos de tiempo.

Se oye rumor de agua...

Alucinamos con los sedimentos del techo. Hay un bloque caído del techo que tenía un spit ¿?

Midiendo el rumbo de la entrada 2.

11:50 Con las dos bocas, lo cierto es que perdimos/invertimos mucho tiempo, (1h) primero midiendo, después fotografiando, y también flipando con el rumor del agua que se escucha en el ramal izquierdo que conecta con la otra cavidad.

Seguimos a la faena. 

12:50 Seguimos para abajo y llegamos al nacimiento permanente del caudal de Viandico. Un aporte que parece menor, pero que no es nada despreciable. Al parecer, también hay aportes subterráneos del otro lado (por una aporte de las galerías superiores de la Cueva del Moro, en la zona que no se visita, Galería GES). Tras echar un trago y refrescarnos, seguimos a la faena. 
Es curioso, en este punto oímos voces, imaginamos que de un grupo que debió bajar por el acceso de la cueva para hacer el barranco. No subieron a conocer el manantial, y no los vimos. Nos llamó la atención que estuviéramos todo el día y no viéramos a nadie en todo el recorrido. Aunque pensando que entramos por la parte que no se se suele hacer, y que cuando pasamos por el tramo "comercial" ya íbamos en horario de tarde retrasado, no es tan extraño.

Llegamos al manantial.

La fuerza que llevará el agua para mover el tronco y dejar esas marcas en la piedra.

Visitamos todas las oquedades que vemos...

Hay numerosos agujeros más altos, saldrá agua en crecidas ?

Panales de miel?

Parecía algo de lejos...

Pero es impenetrable.

Llegamos a la entrada de la cueva del Molino de Aso. Está vallada desde hace cuatro años. Se quiso cerrar para reducir el nº de visitantes y cobrar por las visitas, pero no se ha llegado a un acuerdo, y ahora mismo está cerrada.

Seguimos a lo nuestro, y además, en esta ocasión, en lugar de ir "por lo cómodo" tenemos que ir por donde va el agua, tanto en el meandro como en el caos de bloques, lo que lo hace un poco más largo todavía. También buscamos la salida de agua de la boca inferior de la Cueva del Molino de Aso o del Moro hacia el barranco.

Hacemos una pausa.

Topo de las dos cuevas.

La entrada a la cueva del Molino de Aso está cerrada.

Como vamos midiendo no saltamos.

Las labores de medida nos retrasan.

¡Esto no está pagado!

Esa cueva no la pudimos explorar, queda muy alta.

Este tramo que normalmente se hace corriendo, nos llevó su rato.

¿Marmota?

Confluencia del agua de la Cueva del molino de Aso.

17:30 Cuando llegamos al rapel final, ya estamos cansados de tanta medición. Queda poco, pero lo vamos a dejar en este punto y ya volveremos otro día. Miguel tiene viaje a Tarazona y cita para vacunarse al día siguiente, y después de toda la tralla que llevamos encima, sólo nos apetece plegar. Nos cambiamos y subimos volando por el sendero el retorno hasta el parking de "La Tella" de arriba. (Escasos 15 minutos "a fuego" desde la pasarela del Viandico al coche.

Seguiremos a la faena.

Subimos a Nerín y nos despedimos. Yo tengo pendiente para mañana el Bramapán.

Pasando los datos al programa de cartografía.