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domingo, 10 de septiembre de 2023

Explorando por Dévanos, Cueva de los Murciélagos y Cañón de Añamaza.

 Miércoles 6 de septiembre de 2023

Cueva de los Murciélagos y Cañón de Añamaza.


Después de currar, salgo sin comer, a dar una vuelta por el entorno de Dévanos y el bonito cañón de Añamaza. La idea original era localizar la cueva de los murciélagos de Dévanos, cuya ubicación exacta desconozco, y luego correr hasta donde tenga tiempo.

Tramo intermedio del cañón.

Desde Ágreda, me desvío hacia la pequeña localidad de Dévanos. Como mi primer objetivo era localizar la cueva de los Murciélagos, en lugar de salir desde el pueblo, voy con el coche por pistas hacia donde creo que está la cueva. El tramo final de pista por donde me meto con el coche no está muy bien y termino por aparcarlo. 

Voy con mochila para la cueva, con frontal, mono, trípode, casco y demás. Sabía que estaba al pie de un pequeño cortado. Tras dar un par de vueltas, localizo una pequeña traza de sendero que por fortuna, me lleva a la cavidad. Una zarza protege la entrada. Tan contento de haberla localizado relativamente rápido (podía no haber tenido tanta suerte), me cambio de ropa antes de entrar. Una vez allí, me llevo una decepción, la cueva apenas tiene 20 metros de desarrollo, y lo que sí tiene, es una buena colonia de murciélagos, que están algo alterados. Tras sentarme un rato para que se tranquilicen, hago un par de fotos y me voy para afuera. 

Dejo el coche y sigo a pie primero por pista y luego campo a través.

Justo al divisar la parte baja del cañón hay un pequeño talud rocoso.

Siguiendo una vaga traza doy con la cavidad.

Entrada cueva de los Murciélagos de Dévanos.







Sala principal al poco de entrar

Sala final.


Pequeño agujero a la izquierda.

El agujero termina cerrándose.


He leído que cerca del río hay otra cavidad, pero con la tarde tan buena que hace, casi prefiero conocer la zona (es mi primera visita) y vuelvo al coche. Dejo los trastos y me voy a correr. Me dirijo campo a través hacia la pista que sale del pueblo, y luego ya, por la pista, jalonada de construcciones abandonadas y numerosas oquedades con formaciones tobáceas por doquier, voy hacia el Mirador del Cajo o Fuentestrún. Se trata de un tramo acondicionado en 2011, pero que hoy ha sido engullido por la vegetación, y cuesta adivinar y seguir el sendero que desciende hacia el Molino o antigua central eléctrica. 



Multitud de oquedades y formaciones tobáceas.






Ruinas de la antigua estación eléctrica.

Descenso salvaje

La canalización de agua de la central está excavada y protegida para evitar caídas.

Descenso pegado a las paredes con formaciones.

Sin rastro de senda.


Formaciones cercanas al "camino"


La vegetación ha colonizado el sendero.





Bajo como puedo por un terreno tan bonito como salvaje y tras varios pasos delicados y rodeos, termino de descender. Después, tramo entre fincas y choperas, cerca del río se ven pequeños saltos de agua, cuando por fin termino de salvar obstáculos, subo hacia el camino que baja de la Cuesta del Cajo. He dedicado casi 20 minutos para bajar 500 metros de distancia. Continuo luego por el camino que se transforma en senda. 

Tramo cerrado de vegetación.



He bajado por la izquierda y aquí conecto con la pista de la Cuesta del Cajo, por donde luego volveré.


Disfruto como un enano. Me encanta, lo salvaje y solitario del terreno. Además, como es final del verano, todo la vega da sus frutos y puedo merendar a mi antojo. Moras, almendras, ciruelas, higos,... una delicia. Sigo bajando hasta el Corral del Cajo. Allí, aunque con gusto seguiría, tengo que dar la vuelta. No quiero que se me haga de noche.






Meriendo con los frutos del campo.



Sigo viendo pequeñas cavidades.


Los corzos campan tranquilamente, les extraña ver gente por aquí.



Llegando a los corrales del Cajo


Encuentro más comida...😜

Corrales del Cajo y formaciones tobáceas.

Erosión por desmoronamiento.

Con las últimas luces llego al coche. Moncayo al fondo.

El recorrido realizado.


El retorno me cuesta menos porque no realizo paradas y subo por la pista de la Cuesta del Cajo. Con las últimas luces llego al coche. Satisfecho y con ganas de volver en primavera. La próxima intentaré llegar hasta Valdegutur, 26 km ida y vuelta. 

La ruta me ha salido de 7 kilómetros, menos de lo que pensaba, pero es que hice muchas paradas y el camino de la bajada de Fuentestrún me llevó bastante rato.
Zona interesante, para volver.

3 comentarios:

  1. Felicitaciones David por tu reportaje. Me has hecho recordar los años 60 de mi infancia. En esa época recorrí infinidad de veces esos lugares. El Cajón era la despensa de Devanos y también se vendía para otros lugares mucha manzana que se subía a lomo de machos y mulas en sermones,cuévanos, alforjas y otros. Eran tierras que producían todo tipo de frutas y hortalizas. Desde hace muchos años tierras abandonadas y olvidadas por la falta de acceso vehicular y maquinaria agrícola. En fin ,ojalá
    se
    Recuperará tanta belleza y riqueza de estos lugares

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    1. Léase Cajo y no cajón. Así mismo serones y no sermones

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    2. Me alegro de que te haya gustado el reportaje. Tengo pendiente retomar la visita para llegar hasta el final del embalse...

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