Cueva de San Cristóbal (Arganza-San Leonardo -Soria)
Después de mi visita anterior, y ver que había sedimentos que
podían ser interesantes para estudiar y datar la cavidad, se lo comenté a
Miguel Bartolomé, geólogo investigador del CSIC, que respondió con interés a
las fotos que le envié.
El hecho de que sea una de las cavidades a mayor altura del cañón, casi 100 metros por encima del río, apunta que pueda ser de las más antiguas. En cuanto pudimos, organizamos una visita, a la que
también se apuntaron Luis y Fernando.
En esta visita, Miguel quería comprobar que la cueva podía tener interés para su datación, así que planteamos una visita rápida antes de traer material para recoger muestras, y en plan ligero hicimos un recorrido por la cueva. Miguel localizó sedimentos por todos los lados, muchos más de los que había visto yo. El hecho de ver estratos verticales, el tubo de presión, sedimentos por el techo, numerosos "pendants", le hace presuponer a Miguel que igual se trate de una cueva hipógena, que para los neófitos como yo, viene a decir que igual esta cueva se formó inicialmente por el paso de aguas calientes ascendentes, y no sólo por filtraciones descendentes, que es la característica predominante, por disolución de calizas. Más info en Hypogenic-Caves , 2021 es el año dedicado especialmente a estas cavidades, que en Murcia tiene un gran potencial.
En esta ocasión dejamos sin ver algunas zonas, e hicimos un recorrido en sentido antihorario. Yo aluciné al ver un goteo en una estalactita a partir de una burbuja de aire. Lo había visto en fotos pero nunca en vivo, me pareció muy chulo, es como si la cueva respirase.
Ese goteo con burbuja daba la sensación de que la cueva respiraba...
Buscando la sima del final, Luis se empeñó en forzar un paso estrecho para entrar a una pequeña galería. La entrada era muy justa, y exigía además contorsionismo. Entró primero Luis, no sin dificultades, y luego Miguel más fácilmente. Fernando y yo, preferimos quedarnos fuera, no cabíamos por el paso. Sin embargo, mientras estaban dentro, fuimos por la izquierda a ver si encontrábamos una conexión, y paso había, pero de nuevo muy estrecho y no pudimos pasar. Miguel sale de la salita, en la que hay algunas excéntricas, con cierta facilidad, pensamos, bueno, no era para tanto. Pero cuando quiso salir Luis, uf, lo que le costó, estuvimos un buen rato, ya casi nos veíamos saliendo fuera a por cortafríos y maza para hacer una desobstrucción para agrandar el paso y que pudiera salir.
Después seguimos buscando la sima sin éxito, que dejamos para otra ocasión. Exploramos en el ramal más distante, un poco más que en mi anterior visita. Y dejamos sin visitar de nuevo, la conexión de la sala del Potato con la sala que hay debajo de la sala de las raíces de la entrada.
A pesar de sus modestas dimensiones, no llega a 200 metros de desarrollo lineal, y apenas 350 metros de recorrido, es una cueva interesante. El acceso rápido, a 15' minutos del coche, una corta pero intensa subida desde la aldea de Arganza, junto a San Leonardo de Yagüe (Más información de acceso y topo en la entrada de mi visita anterior). La entrada es el punto más incómodo. Un tobogán estrecho en rampa, con un primer resalte algo complicado, del que nos podemos ayudar de una cuerda de tender. Bajada la rampa, y pasado el arco/agujero que da acceso a la sala de las raíces, ya podemos ponernos de pie y recorrer cómodamente gran parte de la cueva, entrando por el tubo de presión. Aunque la cavidad contiene numerosos pequeños rincones que nos exigirán agacharnos y arrastrarnos si queremos verlos todos. Numerosas formaciones compensan la visita.
Aproximación evidente junto al tendido eléctrico.
Pasada la valla, enseguida, una senda a la izquierda, nos lleva a la cueva.
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