davidmalabarista 2.0: febrero 2025

jueves, 6 de febrero de 2025

Intento a Urbión por el Cortafuegos de la pista de Cebrián

Sábado 1 de febrero de 2025

Intento a Urbión por el Cortafuegos de la pista de Cebrián.

Tras el buen sabor de boca de la tarde anterior, me animo a volver a subir, aunque con un objetivo diferente, al pico de Urbión, con un inicio distinto y por el que no he subido nunca con esquís, (el día anterior subió otro compañero- su track) y me dijo que estaba muy bien.

Fría jornada castigado por el viento.

En casa, antes de salir, veo que ha cambiado la previsión, y aunque días atrás daban bueno para el sábado y malo para el domingo, la cosa se cambió por completo. Dan viento y nubes toda la mañana, así que retraso la salida y no madrugo. voy dejando pasar el día a ver cómo evoluciona. En teoría daban que despejaba y que el viento se calmaba. Finalmente salgo a la 1 de casa. Antes de las 2 estoy aparcado en la pista. La idea es subir desde el cortafuegos que arranca al poco del desvío del arroyo del Revinuesa, por la pista de Cebrián. Aparco en el inicio de la pista de Revinuesa (un año subí por el arroyo del Revinuesa con esquís, y fue una tortura de poner y quitar esquís por la falta de nieve, cruzando mil y un arroyos). Cuando llego, está chispeando y ni rastro de sol...

Tremendo bajón de motivación, estuve a punto de volverme a casa. Dejo pasar rato a ver cómo evoluciona. Veo que la nieve esta sopa, de hecho, la pasta de nieve que hay en la pista hace que la conducción sea delicada... e intuyo que no habrá buenas condiciones para esquiar, pero deseo (sin muchas esperanzas) que por arriba la cosa será diferente...

Un tímido rayo de sol de unos instances hace que me anime a calzarme las botas. La lluvia y la subida de temperatura ha hecho que desaparezca mucha nieve, así que decido salir porteando esquís. A los 10' minutos, veo que la nieve húmeda y blanda tiene grosor suficiente para no estropear las focas con las ramas y/o piedras y me calzo esquís. El día no termina de arreglarse, pero al menos no llueve. Sigo por el cortafuegos, que ya conocía de una vez que bajé por allí en verano, al llegar al cruce de cortafuegos que enlaza con el que sube al cordal, y que es el que cruzamos normalmente cuando subimos por la pista de Cebrian, me ubico. Vistas al Zurraquín, por donde falta nieve para bajar por su agradecida cara NorEste. Ya que tengo la huella del día anterior de José, la aprovecho y descubro un nuevo trazado que no conocía, no es un camino frecuentado, al menos no se intuye, pero es fácil ir guiándose hacia el cordal. Cruza el bosque en diagonal de manera ingeniosa y sale a la "ceja" por la que ganamos el cordal. En esta ocasión salgo más adelante de lo habitual, pero se sube y enlaza por arriba.

Ya por terreno conocido, y con el cielo a ratos más despejado, continuo por el cordal, pero el aire que hasta ahora no había molestado al ir protegido por el bosque hace su aparición. Es frío y molesto, con ráfagas fuertes puntuales. Me encamino hacia Hoyo Oscuro, antes, paso por tramos de nieve cristal que casi piden cuchillas, pero se puede ir librando, subiendo al pico, sin árboles en los que protegerse del viento, se hace duro continuar. En alguna ocasión llego a ver Urbión, pero la mayor parte del tiempo, las nubes tapan la cima incluso del propio Hoyo Oscuro.

No tengo ganas de padecer, y como ya es algo tarde, son las 5 pasadas, prefiero renunciar a cima y me doy la vuelta en la antecima de Hoyo Oscuro. Me queda poco en distancia y desnivel, pero no merece la pena. Bajo unos metros con focas hasta encontrar protección. En un árbol, a su abrigo, quito pieles y bajo por la misma ruta de subida. Al principio por nieve dura sin problemas, luego antes de la "Ceja" hay nieve trabajada por el viento, pero que deja hacer, pero ya just antes de entrar al bosque, me encuentro nieve costra. Por fortuna, en el bosque la nieve no ha transformado demasiado y deja bajar con relativa comodidad, es el tramo que más disfruto. Cuando conecto con el cortafuegos, se acabó lo bueno. La nieve húmeda de la subida está ahora helada dejando una costra muy molesta, casi peor cuanto más abajo.

Me queda un rato de esquí de supervivencia, teniendo que parar para descansar las piernas de los "obligados" tramos de cuña salvaje. Al final, algo mejor de lo que pensaba, y sobre todo, sin grandes rascadas que era lo que me preocupaba en la subida, bajo incluso un poco más abajo de donde empecé a foquear. Y sólo tengo que portear 5 minutos hasta el coche.

Jornada de las de "vaya o no vaya, cúrtase para el Himalaya". Lo bueno estar sano para hacer estas locuras y que transcurra la jornada sin percances, pero hoy, disfrutar, lo que se dice disfrutar, como que no, quizás unos efímeros momentos por el bosque. Pero para poder valorar días como los de ayer, también tiene que haber jornadas como las de hoy.

Al menos nos ganamos la cena, y pusimos contentas a las mitocondrias pasando frío un rato...😂😁😁