Vuelta al Vignemale con esquis

Sab/Dom 20-21 de Abril de 2013 

Vueltón al Vignemale con esquís!!!

Anda que no le tenía ganas al Vignemale con esquís. Muchos años con el plan en la cabeza, y esta temporada varios amagos de intento, incluso estuve pensando hacerla en solitario, pero al final, se aliaron los astros, buena meteo y compañeros dispuestos a realizar el exigente recorrido. 

En unas condiciones más propiamente invernales, Beto y el valiente Carlos (su 5º día de esquí de montaña, quería probar eso de una gran alta ruta con esquís, y su "desconocimiento" del terreno le hizo pecar de "atrevido", ha vuelto mas que "Licenciado", aunque algo doblado... je je)

Esta salida va a ser de las que recordaremos en el tiempo, por su envergadura, por su gran ambiente de montaña, por su rigor invernal, por sus luces, por sus esquiadas, incluído su bombón final.

Se trata de un recorrido ambicioso y exigente físicamente, pero permite dar la vuelta a todo el macizo del Vignelame, pasando por delante de su impresionante cara norte sin dar la agotadora vuelta en coche hasta Pont d'Espagne.

Lo malo es el porteo inicial, pero es que cuando hay nieve desde Bujaruelo, no se suele poder llegar hasta allí en coche y los días son cortos, con pocas horas de luz.

Que ganas le tenía  al Vignemale...Vaya panorama

Madrugón para comenzar la jornada, salimos de Zaragoza hasta el Mesón de Bujaruelo. Tras un viaje con sueño, nos recibe aire y un frío intenso, 1ºC, que nos despeja rápidito.

A las 9 de la mañana, arrancamos. Mochila con peso contenido, saco, comida, crampones, piolet, esquís,...y empieza un laaaargo porteo de mas de 2h30'.

Un laaaargo porteo por el valle del Ara

Ya sabíamos que tocaría portear un buen rato, pero no pensábamos (mas deseo que fe) que no tanto. En 1h15 llegamos al final de la pista, en la Cabaña de Ordiso, la nieve se ve leeeejos!

la nieve se ve leeeejos!

Paciencia en el porteo!

Curiosos detalles que amenizan la marcha.

Poco antes de la Cabaña de Cerbillona, un alud importante!

En otra 1h15 mas, llegamos a la Cabaña de Cerbillona, debajo de la Moskowa. Allí, paramos un momento, coincidimos con dos montañeros madrileños a los que el fuerte viento no les ha dejado atacar el Corredor Ledormeur, nos dan ánimos, no falta mucho para calzarnos los esquís.

Bco. Espelunz, Pico Espelunz y Cabaña de Cerbillona.

Por fin, tras 2h45' de porteo, nos calzamos los esquís,  cogemos agua y empezamos a disfrutar recorriendo la parte alta del valle del Ara. 

Tras 2h45' nos calzamos los esquís...

Remontando valle arriba, nos cruzamos con dos máquinas; Edu e Iker, vienen de intentar una de las suyas, el Gaube desde Bujaruelo en el día!!!!! Pero a ellos también el aire no les ha dejado ni entrar.

A las 13:00h,  cuatro horas desde que salimos, cuando llegamos a la confluencia con Batanes (del camino proveniente de Panticosa, por donde pasamos hace poco mas de mes y medio, cuando pasamos a Wallon).

Vemos la Canal de Cerbillona, parece ya limpia de coladas peligrosas.

Canal de Cerbillona.

China chano, vamos subiendo y empieza a "cubicar" el pateo, llegamos al fondo del Valle del Ara, ahora solo falta remontar el collado de los Mulos.  

llegamos al final del Valle del Ara.

Vemos gente en el olvidado Pico de las Neveras.

Con la motivación arriba ante el estímulo de tener delante el primer collado del día, subo a buen ritmo hasta el collado de los Mulos. 

Son las 14:30, 5h30 de marcha hasta aquí desde el coche. Me siento a disfrutar del panorama y a esperar a los compañeros que han venido por el otro margen del río y algo mas tranquilos.

El primer descenso del día hacia el Refugio de Oulettes de Gaube. 

Hace frío, pero se puede aguantar, el aire es fuerte pero menos que a primera hora de la mañana (por lo que nos ha contado la gente con la que nos hemos cruzado). Aún así, las cumbres están cerradas, y no se dejará ver fácilmente toda la cara norte mas que en muy breves momentos del día.

Frío y Cumbres cubiertas.

Detalle del Arlaud-Soriac, justito de hielo.

Una vez llegan mis compañeros, cogen fuelle y comen algo, empezamos el descenso hacia el Refugio de Oulettes. Al principio sobre una nieve bordecilla, dura y quebradiza, no es mala del todo, pero acusamos muchos el peso de la mochila al esquiar. Conforme bajamos, la nieve mas transformada, y nosotros adaptados ya al peso, pues que llegamos a Oulettes con cara de qué lástima que se acabe tan pronto lo bueno.

Descenso desde el Puerto de los Mulos. A la Izqda. Coll de Oulettes.

Una bajada que sabe a poco.

La calidez de los Refugios franceses.

Una pequeña ventana de nubes permiten disfrutar de una de las vistas mas espectaculares de los Pirineos.

Llegamos al refugio a las 15:20h, y hacemos una buena parada, para comer y coger agua a tope. El refugio esta abierto, y hay gente, pero no demasiada. Mas españoles que franceses.

Cuesta un poco vencer la tentación de quedarse en Oulettes, pero a las 16:00h nos ponemos rumbo a Bayselance. Pensábamos subir cerca de la cara norte, por entender que la "normal" es mas expuesta a aludes. Pero como hay huella, y la cosa parece estable, subimos por el camino de verano.

El recorrido que nos queda hacia Bayselance.

Sin frío, incluso con algo de calor, comenzamos la subida. Pero pasado el inicio y ganado el primer desnivel, la temperatura baja, y después el aire nos hará abrigarnos.

Comenzamos la subida

Durante la subida disfrutamos de las vista del espectacular Colouir de Gaube, cuyo final no esta en hielo.

Colouir de Gaube

 Tras el llano, la subida final hasta el collado, estamos azotados por un frío aire, casi congelador. Llegando al collado alcanzamos a unos franceses que llevan hasta leña!!

En el collado, azota con fuerza, y yo no paro ni a quitar pieles, y me lanzo directo al refugio. 

El fuerte viento menea las nubes a su antojo.

El grupo de franceses antes del collado.

Beto desde el Collado. Foto by Carlos.

Refugio de Bayselance.

Una vez dentro tratamos de recuperar el calor. No esta la tarde para hacer fotos, hace un fuerte viento y muchísimo frío.

Vistas desde el Refugio.

Cara Norte del Taillón, de lo poco despejado.

Pasaremos la noche 17 personas; el grupo de 5 franceses, 5 vascos, 4 mozos de Pamplona con los que compartimos habitación y nosotros tres. Bayselance, que hasta mediados de mayo no esta guardado deja dos habitaciones y la parte libre durante el invierno. A pesar del frío, resultó muy acogedor, y nuestra estancia fue bastante confortable. A pesar de que hay mantas abundantes, agradecimos con creces haber subido sacos buenos, para recuperar pronto el calor. Luego por la noche, hasta tuvimos calor de tanta gente en la habitación. Para el tema del agua tocó fundir nieve, aunque como subimos cargados de Oulettes tampoco tuvimos que fundir mucha.

En el comedor. Foto by Carlos.

Nuestra habitación. Foto by Carlos.

Tras recuperarnos de la aproximación del día anterior (23km, 8h30 y 1800m de desnivel) partimos los últimos del refugio. El frío es intenso y la nieve esta dura.

 Los franceses salen porteando esquís, nos extraña, pero al entrar a la cuenca del glaciar, entendemos porqué. Hay que bajar por una nieve helada, con fuerte desnivel, y una fractura de la nieve, (tipo grieta) le termina de poner emoción al asunto.

Primeras luces sobre el Petit y el Vignemale.

El macizo de Ordesa despejado.

El descenso hacia el glaciar. Asoma el tejado de Bayselance

Una vez en el Glaciar, ponemos pieles y empiezan los problemas de Carlos. Primero se le resiste la fijación, no hay manera de que quede bloqueada, y al poco, las pieles no quieren pegarse: "Horror, No me pegan las focas!!!" 

"No me pegan las focas!!!"  Beto y yo pegando las focas de Carlos.

Subiendo ya por el Glaciar

Descenso al glaciar y remontada

Mejor ambiente imposible

A la marcheta vamos subiendo, hacemos una huella diferente a la de los primeros, evitando la nieve dura, cuesta un poco abrirla pero es mas cómoda para subir. Cuando asomamos al plató, los primeros ya están haciendo cumbre. Carlos se nota tocado, y decide renunciar a cumbre, queda mucho dia por delante y prefiere reservarse.

Llegando al Plató

Llegada del Gaube y Pitón Carré.

Beto y yo tiramos para arriba. Alcanzamos la base de la trepada final cuando ya bajan los primeros. Sobre nieve dura y buena huella, con piolet y crampones, hacemos cumbre sin problemas. 

Vistas de escándalo y aunque hace frío, sin aire, se está bien. Pero como Carlos espera, bajamos rápidos pero con cuidado.

Trepada final.

Beto llegando a la cumbre.

Bajamos rápidos pero con cuidado.

Empieza el tan anhelado y deseado descenso del glaciar del Vignemale. La primera parte no es muy disfrutona, nieve dura con una ondulaciones incómodas que no dejan esquiar a gusto. Pero después, la cosa cambia y empezamos a gozar. Nieve transformada fácil de esquiar. 

Tan emocionados estamos, que aunque dudamos un momento, tiramos todo tieso rectos por el glaciar. Sin pensar en la sorpresa que nos vamos a llevar...

Beto gozando glaciar abajo...

Beto y yo no sabemos lo que nos espera por abajo...

Pero como era previsible, aquello empieza a inclinarse y no se ve lo que hay por debajo, nos hemos metido encima de las cascadas del glaciar. Y aunque no hay grietas de glaciar, hay unas de fractura del manto nivoso que intimidan igual. Yo que algo me olía, no bajo más, Beto se lanza y dice que con "cuidado" se podrá pasar...

Yo prefiero remontar un poco y jugármela mas a la derecha, tengo suerte, y encuentro una bonita canal, con inclinación pero sin riesgos. A Carlos mientras, como ya ha bajado demasiado, no le queda mas que pasar por donde Beto. Traga saliva, baja entre las grietas derrapando por una zona con mas de 40º. Se porta como un campeón

Yo desde la "barrera" veo la escena, pensando "Dónde hemos metido a este pobre mozo...

En la foto, por la perspectiva, no se aprecia bien, pero el desnivel es importante. Podría parecer que por donde bajaron ellos era menos inclinado, pero aunque en mi variante era mantenida la inclinación,  por donde fueron ellos era bien tieso. La próxima vez que suba en verano por aquí y mire por donde bajamos.... Lo normal en invierno, es bajar por el camino de verano, por el torrente, pegados a la pared, según bajas, a mano izquierda, no por el centro como nosotros.

Nuestras rutas de descenso. 

Recuperados del susto, nos metemos en una zona que nos tenía preocupados, el barranco desfiladero por donde se escapa de aquí, y que suele estar lleno de avalanchas.

Para nuestra sorpresa, estaba mucho mejor de lo que esperábamos. No ha habido grandes avalanchas, y parece que tampoco quede mucha nieve por arriba amenazando, pero por si acaso pasamos rápidos este tramo.

Miramos antes de pasar, por esta zona tan bonita, como intimidatoria.

Parece que no puede caer nada, pero por si acaso, pasamos rápido.

 Cuando ya nos las dábamos por victoriosos, nos llevamos otra sorpresa. Al no haber caído la gran avalancha del siglo, la cascada final no esta colmatada, y el paso es infranqueable. Nos toca retroceder y remontar en busca de la vira del camino de verano. 

De camino hacia la vira. evitando las "grietas"...

Vuelta a calzarnos los esquis.

La vira de escape.

Una vez superado, ya por fin, solo nos queda deslizar hasta la presa, donde en la hierba, junto al refugio, nos damos un merecido descanso y reponemos fuerzas para  lo que nos espera..

Con ese fondo incomparable terminamos la esquiada.

Tras una hora de descanso, y vencida la tentación de bajar a Gavarnie, a las 15:00h ponemos pieles y para arriba. Por delante nos quedan 600m. de desnivel para remontar por el valle de la Canau hasta el collado de Bernatuara, pero sobre todo, mucha distancia.

Con calma y sin prisas, remontamos este largo valle. Tras un repecho inicial entramos al valle. Pasamos por la Cabaña de Lourdes, abierta pero sin comodidades, y seguimos por valle arriba hasta su final, donde se gana el desnivel.

En el repecho inicial.

Valle de la Canau, al fondo a la izquierda el collado de Bernatura.

Desde el collado hacia el valle

En el collado de Bernatuara, sopla un gélido aire, así que no paro, quito pieles y me tiro hacia el ibón, en un flanqueo lateral para remontar en escalera los últimos metros de subida del día sobre un hielo durísimo. 

Ibón de Bernatuara. Foto by Carlos.

En el collado, al sol, y protegido del viento recuperamos fuerzas para el descenso. disfrutamos de las bonitas vistas que ofrece este lugar, en especial hacia la cara norte del Taillon y de Gabietos.

Cara norte del Taillon y Oeste de Gabietos

Nuestro descenso hasta la Plana de Sandaruelo.

Por delante 1000m de desnivel hasta el coche, de los cuales, 600m, los haremos esquiando.

Al principio nos parece que al darle la sombra y con el frío que hace, la nieve estará costra, pero solo son unos metros, luego, sin estar perfecta, nos encontramos un verdadero bombón de regalo inesperado, que nos deja un muy buen sabor de boca para rematar la jornada.

Buen sabor de boca para rematar la jornada.

La nieve final fue un verdadero bombón inesperado..

 Unos 100m de desnivel, por encima del refugio, se acaba la nieve y hay que descalzarse. Luego ya por la senda, ponemos fin a una memorable y larga jornada.

A la caza del "pescado".

Bellas luces para rematar la jornada.

En resumen, una bella travesía, con mas de 40km de recorrido; 23km y 1800m de desnivel en la primera jornada, 8h30' de actividad; y 20km y 1400m de desnivel el segundo, 11h de actividad, paradas incluidas.

Track del Primer dia.

Track de parte del 2º hasta Ossue. falta enlazar por la Canau, pero la bateria del móvil se agotó, sniff!! 

De todas formas estos tracks no son muy fiables, son sólo orientativos, realmente solo valen para verlos a través de Google Earth.

El recorrido

Por si alguien quiere mas información, os dejo el enlace de la Página de Samuel. Él ha hecho este recorrido, corriendo en verano, sin hacer cumbre, en poco mas de 6h30', sólo por desanimar un poco, je je...

Aquí su curiosa película animada del recorrido.