Llega el otoño, menos horas de luz, bajan las temperaturas, primeras nieves, y el espectáculo del color en los bosques caducifolios.
Sin mas pretensión que disfrutar de esas estampas coloridas y hacer fotos salimos en busca del otoño. Pero ya anticipo que con no mucha fortuna. Este otoño no se si veremos grandes colores...
En esta ocasión, tuve la suerte de recuperar a Nacho "Agüelo2" para la escapada. Tras muchas quedadas sin concretar por fin haciamos coincidir nuestras agendas y subimos al Pirineo juntos. Eso sí, sin un destino claro, queremos probar fortuna por la vertiente francesa, a ver que encontramos...
Chemin du Labayas
La primera parada la hacemos por el valle que parte de Accous, hacia las faldas del pico Ronglet y el collado de Iseye. Se trata de una valle nuevo para los dos. Desde el mismo pueblo parte un sendero "Chemin du Labayas" que discurre junto al rio para terminar en el collado de Iseye (5 horas después).
Como el dia no esta muy prometedor, recorremos el valle con coche por carretera y luego por pista hasta el Plateau d'Aoulet.
Desde el final de la pista ya podemos intuir al triángulo del Ronglet.
Nos acercamos hasta el pequeño rincón de La Gargande, donde una pequeña cabaña en un llano cierra el valle.
Desde aqui el sendero sube en 3h al collado de Iseye. Aqui el otoño va lento, esta verde, y en otros casos las hojas de las hayas están por el suelo. No sentimos la "llamada" y decidimos ir a probar al otro margen del Somport.
Collado de Bouessou - Cabaña de Icheus
Desde la pequeñas y tranquilas localidades de Lees-Athas, se asciende por una preciosa, estrecha e intrincada carretera que conduce a la Pierre de San Martin. (Carretera de recorrido muy recomendable en otoño). Nosotros nos detenemos en el Collado de Bouessou. Donde, desde un idílico merendero, arranca una pista que conduce hacia la bucólica cabaña de Icheus. Subimos con coche hasta la Plataforma de Catazar, ahorrándonos asi 45' de marcha. Desde allí, tomamos el sendero que en medio del bosque y de forma directa alcanza un llano superior. La subida es intensa y sin descanso, pero el entorno es de gran belleza. La parte superior es uno de esos sitios a los que uno se imagina en sueños que son los prados idílicos de los Alpes, verde, abetos, calma, ..mágico! El esfuerzo a merecido la pena.
Para nuestra sorpresa el dia va aguantando, y de paso, algún rebollón tras otro va saliendo por fuera del camino, y aunque nos entretenemos un rato mirando, al final casi nos llevamos a casa 1 kg!!
Nos llegamos a comer al Refugio de Icheús, pequeño y sin muchas comodidades, pero que su entorno compensa con creces la visita. Existe un pequeña fuente en las proximidades, y el hayedo de encima invita a perderse en su interior.
Las nubes suben amenazantes...
Reponemos fuerzas, y con el permiso de las nubes, queremos subir por el hayedo hasta el Pas d'Azuns para conectar con el valle de Lescún, y la ruta de subida al Anie desde Laberouat. (recorrido ya realizado en nov'09)
La niebla nos invade, y decidimos dar la vuelta, ya que tampoco vamos sobrados de horario. Otra vez será...
El regreso entre la niebla es algo mágico, una delicia de sensaciones...
otra estampa casi onírica... lástima, pero no vimos a ningún duende!!
¡Hola!
ResponderEliminarBuscando información sobre la zona he llegado a esta entrada de tu blog.
Estamos pensando en hacer una salida en bici, ¿hasta donde crees que se podría acceder en bicicleta? ¿Hasta la plataforma de Catazar o más arriba?
Muchas gracias por compartir tus salidas.
Hola Jose! Mejor si me dejas un mail para contestarte con mas amplitud. No leí tu comentario hasta hoy, 4 abril.
ResponderEliminarEfectivamente con bici de Montaña se puede subir sin problemas hasta la Plataforma de Catazar, a partir de allí, la pista continua pero se desvia. El sendero que sube directo es demasiado tieso para subirlo en bici (con muy buen nivel de descenso, se podría bajar por él, pero solo para los muy cañeros).
La red de pistas que hay por debajo, te permitiria remontando un cacho empujando la bici campo a través, y saliendo al llano previo al refugio, a los prados de hierba. Seria dificil acertar sin conocer la zona. En cualquier caso, solo ir hasta alli por esa carretera es una gozada, y una paliza! y si se quiere, continuar hasta la Pierre de St. Martín, toda una proeza!
Suerte!